Los primeros quince minutos parecían una señal positiva para San Martín ante Racing. Gonzalo Rodríguez primero, luego Rodrígo Moreira y por último Adrián Arregui, encendieron las alarmas del arco de Javier García al inicio del partido. San Martín se mostraba distinto. El enlace en el juego de Tino Costa y las buenas descargas de Claudio Bieler hacían ilusionar a la parcialidad local que reventó Ciudadela.
No obstante, a los 17′ un pelotazo de Nery Domínguez tomó mal parada a la última línea del Santo, se filtró Lisandro López e Ignacio Arce en su afán por despejar, calculó mal y tocó la pelota con la mano afuera del área, lo que le valió la expulsión.
Jorge Carranza tomó el lugar de Arce, lo que le valió el cambio a Tino Costa que jugó muy pocos minutos. El golero, cuando se jugaban 37′ de esa primera mitad, le tapó el gol a Lisandro López primero, y en el rebote a Cristaldo, en una intervención preciosa para mantener el cero en el arco.
Para el complemento, Gastón Coyette mandó a la cancha a Emiliano Purita en lugar del amonestado Gonzalo Rodríguez. Sin embargo, un Racing protagonista abrió la cuenta antes de los cinco minutos. Ricardo Centurión tiró un centro preciso a la cabeza de Augusto Solari, que le cambió el palo a Carranza y puso la ventaja para la visita.
La noche se ponía oscura para el local, que debía remontar el resultado con un jugador menos. De todos modos, la esperanza seguía viva en las manos de Jorge Carranza, que le tapó un gol hecho a Cristaldo.
Ahí, Coyette se la jugó y puso a Franco Costa. Paqui entró encendido, la guapeó contra Lucas Orban, le ganó la línea final y puso un centro milimétrico para Bieler, que puso el empate cuando transcurría el minuto 27 del complemento.
La gente nunca dejó de empujar y el entorno lo confundió a Racing y le dio un impulso anímico maravilloso a San Martín, que igualó al rival desde lo psicológico. Así entonces, a los 33′, Matías García desbordó por la banda izquierda en una corrida memorable y mandó el centro atrás, tomándose un segundo para pensar el pase, al pie de Bieler que no falló y puso la ventaja.
Para el final, quedaron un par de llegadas de Racing, pero la sentencia parecía estar escrita y pintada de rojo y blanco, en una noche que quedará en el recuerdo de todo el pueblo Ciruja.
Ahora, San Martín volverá a trabajar este lunes a las 17 en el Complejo Natalio Mirkin. El equipo visitará a Talleres, el próximo sábado a las 20 en el Mario Kempes.
