Dos semanas intensas de trabajos quedaron atrás y, este lunes, el Santo empezó a transitar un etapa diferente. De regreso en Tucumán, el entrenamiento fue en el Natalio Mirkin y el grupo sabe que se acercan los días de partidos o “la parte más linda”, como responden ante cada consulta. En lo más próximo asoma el amistoso ante Atlético Tucumán y luego, llegará el turno de Patronato, por los 32vos de final de la Copa Argentina.

Sin distar demasiado de lo que se vino observando en estos días, Darío Forestello dispuso de trabajos con pelota. Hubo definición y fútbol en espacios reducidos. Al DT le gustan los bloques de intensidad y el grupo le está respondiendo de la mejor manera. Son días claves, ya que significarán el sostén de la temporada.

Sin perder de vista que el objetivo empieza en la Superliga, el grupo del Santo volverá a entrenarse este martes por la mañana en el Complejo. Luego, en la tarde de martes y en la mañana de miércoles, lo harán aquellos que no serán titulares ante el Decano. El jueves post partido, volverán a trabajar todos juntos.